A no dudarlo la celebración más popular en occidente es la Navidad, y además, sin duda, la más exitosa en el aspecto comercial porque todo el mundo recibe o da algún regalo. La celebración del Halloween es la segunda fiesta universal por su popularidad e importancia pero es la más antigua de todas pues se le adjudican al menos seis mil años de existencia, mientras que la Navidad apenas tiene 2016 años.
Cuatro mil años antes de cristo los celtas, antiguos pobladores de Europa Occidental, Oriental y parte de Asia Menor, creían que el 31 de octubre, fecha que coincidía con el fin del verano, los muertos podían resucitar y salir de los cementerios para apoderarse de los cuerpos de los vivos. Incapaces de luchar contra tan poderoso enemigo inmaterial decidieron que era mejor hacerse amigos de él y comenzaron a congraciarse con los espíritus dejándoles comida fuera de sus casas para que la tomaran y siguieran su camino sin que los asustaran o agredieran. Ese es el origen real de la costumbre de obsequiar dulces y caramelos ese día.
Pero mientras algunos se mostraban generosos con los espíritus, otros más resolvieron que era mejor esconderse de ellos tras máscaras y disfraces para que los muertos no les reconociesen como humanos y quedar así a salvo. Sus casas eran igualmente adornadas – afeadas, mejor – con elementos que pudieran asustar a tales espíritus, tales como horribles faroles y huesos para ahuyentar a los espíritus malignos.
Cuando a comienzos del siglo IV el emperador Constantino decretó que los habitantes de su imperio se convirtieran al cristianismo, muchos ritos paganos se introdujeron. Fue así como el festival de Samhain, como llamaban los celtas a esta celebración pagana, fue arropada tangencialmente por el cristianismo.
Hacia el siglo VIII, la Iglesia Cristiana convirtió el día 1 de noviembre en el Día de Todos los Santos para rendir homenaje a aquellos santos que no tuvieran un día particular de celebración. A lo largo de los años, estos festivales se combinaron, y la mayoría llamó “All hallow mass” (la masa de todos los santos, de las personas santas) al Día de Todos los Santos. La noche anterior se conoció como “All Hallows Eve” (Víspera del Día de Todos los Santos). Con el tiempo, su nombre se convirtió en Halloween.
En Unicentro Cúcuta tradicionalmente le concedemos especial importancia a esta celebración con muchos obsequios, rifas, concursos, sorpresas y una ambientación que recrea de manera espléndida el espíritu de la fiesta de los niños. No encuentra en Cúcuta una mejor locación para fotografiar a sus hijos, sobrinos, nietos y ahijados. Son ellos nuestros invitados especiales y los verdaderos protagonistas de la gran celebración familiar.