Si hay una celebración muy antigua esa es la del Día del Padre. Hace unos 4.000 años en Babilonia un joven habría hecho una tarjeta para su padre, moldeada en arcilla, en la que deseaba suerte, salud y una larga vida para su padre.
Desde entonces se instituyó la costumbre de dedicar un día del año en a honrar a los padres, tal como se hace con las madres, en un gesto de reconocimiento al importante papel que ellos cumplen en la familia y en la sociedad. Algo más de 70 países adoptaron le fecha del tercer domingo de junio para tal celebración, entre ellos están los Estados Unidos y todos los países americanos, además de Francia, Turquía, Japón, el Reino Unido, los Países Bajos y Sudáfrica y la casi totalidad de aquellos considerados como de occidente.
En Estonia, Finlandia, Islandia, Noruega y Suecia celebran el Día del Padre el segundo domingo de noviembre de cada año, mientras que, en Taiwán, el Día del Padre se celebra el 8 de agosto. Pero, independientemente de la tradición cultural de cada país, lo destacable es que en todo el mundo se reconoce la importancia de los padres por su papel trascendental en la formación de los hijos.
Son ellos quienes deben imprimir carácter y dar la formación moral necesaria para construir una familia de buen nombre, donde los hijos se críen en un medio respetado y respetable. Esto es lo mejor que podemos hacer por ellos y el día de mañana nos lo agradecerán más que cualquier juguete costoso que pudiéramos regalarles. Cuando por alguna razón el padre no está presente en ese proceso formativo, a la madre le toca multiplicar sus esfuerzos para atender esas áreas tan importantes para definir la personalidad de la hija o del hijo.
El día del padre es un día importante en la familia porque exalta el esfuerzo que hace un padre por sus hijos, es un día que da la oportunidad a las familias para que los niños aprendan a expresar amor hacia sus papás. Las actividades que hacen los hijos con sus padres este día ayuda a fortalecer el lazo con sus progenitores, y al desarrollo emocional correcto de los niños.
Y no es solo importante para los niños sino también para los adultos porque nos da la oportunidad de expresar nuestro agradecimiento a nuestros papás por todo la dedicación y cariño que pusieron al criarnos.
Es, además, una fecha especial para recordarnos los desafíos y las metas que nos impone la paternidad en general con lo que, si alguien ha sido como nuestro padre y nos ha cuidado o enseñado en esta vida, aunque haya sido por breves momentos, entonces esa persona merece nuestro reconocimiento.
En Unicentro Cúcuta queremos y tenemos lo mejor para todos los papás, a quienes rendimos tributo de admiración y aprecio en su día.
El día del padre es un
día importante porque
exalta el esfuerzo que
hace un padre por sus
hijos, es la oportunidad
para que los niños
aprendan a expresar
amor hacia sus padres.