La serie del “Chavo” ha sido por años una fuente inagotable de inspiración y sonrisas. En uno de sus capítulos Don Ramón llega a la vecindad voceando “sombreros, botellas o ropa usada que vendan” y Doña Florinda lo cuestiona diciéndole, “¿ese es el maravilloso empleo que consiguió, de ropavejero?” a lo que responde “Yo, no soy...