La propina es una costumbre social de la que no hay certeza de cuando comenzó, aunque para muchos historiadores ello pudo ocurrir en el siglo 16, es decir, tiene cinco siglos de existencia y la originan los huéspedes que dejaban dinero para los empleados de sus anfitriones.
Es una buena costumbre que puede volverse odiosa cuando le hacen perder su carácter voluntario y la quieren hacer obligatoria. El fenómeno ha llamado mucho la atención de los economistas, pagar más, a pesar de que no estamos obligados a hacerlo, parece ir en contra de nuestro propio interés. Pero es un error coger fama de tacaño en un sitio que frecuentas porque los meseros se desquitan. Y no querrás saber cómo.
Pero la práctica se ha extendido por todo el mundo, literalmente. Aunque cualquiera que haya viajado sabe que las costumbres que rodean a las propinas (cuándo darla, cuánto, a quién y por qué) difieren de un lugar a otro.
La propina en Colombia es un pago voluntario que realizan las personas en establecimientos comerciales, especialmente en restaurantes, como una retribución por el buen servicio prestado.
La Superintendencia de Industria y Comercio (SIC), entidad encargada de regular esta “figura” en el país, describe la propina como “una muestra de agradecimiento por la forma en que fue atendido por cierta persona”.
La propina – en inglés “tip” puede ser sugerida por el establecimiento de comercio y la aceptación dependerá de la voluntad del consumidor, por lo cual se le delegó a la Superintendencia de Industria y Comercio la tarea de impartir las instrucciones a la forma en cómo se debe informar a los consumidores acerca de los precios y de la voluntariedad de la propina.
Es recomendable tomar en cuenta, antes de dejar propina, lo siguiente:
1. Solo tú debes determinar el monto y concederla si el servicio lo amerita.
2. Se recomienda dejar entre el 10 y el 15% por tu consumo total. Pero si el servicio te gustó mucho puedes dejar la cantidad extra que quieras, no hay n techo para esto.
3. Evalúa el trato del mesero, no es lo mismo ser atendido por uno que sea novato que por uno que sea muy cortés u profesional.
4. El factor más importante es la comida, califícala en relación a si cumplió con tus expectativas, si estaba caliente y que tan rápido te la llevaron a la mesa.
5. Por último, considera qué tan rápido llegó tu cuenta y si procesaron tu pago de manera eficaz.
No olvides dejar la propina en efectivo, pues en varios lugares, los meseros deben esperar hasta dos semanas para obtener este incentivo si pagas con tarjeta.
En Colombia en ningún caso la propina que sugiera el establecimiento podrá superar el 10 por ciento del valor del servicio prestado, adicionalmente, al cliente se le deberá preguntar si desea que la propina sea incluida en la factura.
La ley 1935 de 2018 también le prohíbe a los propietarios destinar parte de la propina que han recibido sus empleados para gastos como reposición de elementos de trabajo, pago de turnos, los cuales les corresponden exclusivamente a los establecimientos.
Los ingresos que por concepto de propinas reciben los trabajadores de los establecimientos no constituyen salario y, por consiguiente, en ningún caso se podrán considerar como factor salarial, de conformidad al artículo 131 del Código Sustantivo del Trabajo.
Los establecimientos pueden sugerir el valor de la propina, no obstante, el cliente puede rechazarlo, aceptarlo o modificarlo. Los propietarios y administradores deberán informar a las personas que la propina es voluntaria de manera verbal o mediante avisos fijados en el establecimiento, así como en las cartas.
Adicionalmente, será obligatorio preguntarle al consumidor si desea o no pagar la propina y si esta puede ser incluida en la factura.
El consumidor puede decidir en cualquier momento si desea o no pagar la propina o si quiere modificar el valor sugerido, incluso después de que se expida la factura de venta.