Llegó el mayor y mejor espectáculo del mundo, el que atrae a negros, blancos y amarillos, el que enloquece a niños, mujeres y hombres, a pobres y ricos. Todos los mundiales, desde el primero en 1930 en Uruguay, han traído sorpresas, han causado tristezas, pero, por encima de todo, han entregado alegría a quienes aman el fútbol.
El mundial es el certamen de los hombres perfectos, jugadores que son los actores de todo este espectáculo, los que no se pueden equivocar ni en lo físico, porque tendrán que correr en cada partido al máximo; ni en lo técnico, por que tendrán que ejecutar con el balón de la forma más precisa, menos en lo emocional, no podrán perder la cabeza, como lo hizo Zidane en el mundial de Alemania, por ejemplo. Quien la pierda lo perderá todo.
Es el mundial de los equipos equilibrados, que responden a las exigencias de ataque y defensa, aquellos que sienten esa gran necesidad de ser ofensivos sin perder su espalda, pues la historia lo dice, quienes sólo saben atacar no logran llegar a una final, ejemplo Brasil en España 1982, así como aquellos que solo saben defender tampoco podrán estar en el último partido.
Se ve un mundial con un fútbol bien jugado, el clima y ambiente europeo permiten un juego rápido, campos mojados que facilitan ritmos intensos, de selecciones aportando en ataque y defensa.
Es el mundial de los equipos compactos, dinámicos, atrevidos, solidarios y prácticos que se entregan el uno para el otro y todos para su camiseta, Aquellos que sueñan con el individualismo no serán ganadores.
Acá se dan cita equipos con diversos conceptos de juego, de variados posicionamientos, con tendencias como el 1:4:3:3; el 1:4:2:3:1, el 1:4:4:1:1 y el 1:5:4:1 como posicionamientos de juego en defensa, que se transforman en el 1:3:4:3 y hasta en el 1:2:4:1:3. Múltiples son las variantes especialmente en ataque, con jugadores talentosos, tácticos, que juegan en conjunto.
Las transiciones rápidas de defensa para ataque y de ataque para defensa son el accionar más común de chicos y grandes, el mundial de Rusia reserva el espacio para equipos funcionales tácticamente, dinámicos, que se posicionan bien y que no pierden el orden en los 90’ de juego.
Se practica un fútbol de presiones en campo contrario, buscando recuperar rápido y cerca del arco contrario el balón, de no dejarle elaborar fútbol al contrario, igual se juega con el balón al piso, aquellos que la tiran o juegan un fútbol disputado, no tendrán opción de ganar.
Las estrellas como Messi, Ronaldo, Neymar, Iniesta, De Bruyne, James y otros, tendrán que poner sus capacidades al servicio del equipo, solos nunca podrán encontrar el objetivo de ser campeones.
Potencias como Brasil, Alemania, Argentina, España, llamadas a ser ganadores, no les será fácil, el oficio y la entrega de los chicos les hará difícil el camino, pues en un mundial muchos se preparan para no perder al menos con los protagonistas.
Que viva el fútbol, que siga rodando el balón y que gane el que mejor lo haga, que los once sepan que hay que darlo todo, que no habrá un después, el fútbol es hoy, no fue ayer ni es mañana.
Por: Jorge Luis Pinto Afanador* (Exclusivo para Unicentro Contigo)