Recordemos que primero fue Chávez quien le quitó 3 ceros a la moneda venezolana “para optimizar el manejo del cono monetario ante la elevada inflación que vive la economía venezolana”, creando el llamado Bolívar Fuerte. Después fue Maduro, quien de un solo tajo le quitó otros 5 ceros al bolívar para “ahora si equilibrar la economía del país”, naciendo así el Bolívar Soberano.

Luego de un achicamiento tan drástico del valor de la moneda del vecino país tras quitarle 8 ceros, ahora se hace necesario emitir moneda de mayor denominación para hacer viables las operaciones corrientes del venezolano y entonces salen con el billete de 1 millón de bolívares, cuyo valor real no supera los mil quinientos pesos colombianos.

Para hacer un mercado modesto una ama de casa deberá echar en su cartera unos cuantos billetes de millón, lo cual parece ahora improbable por la gran penetración que tiene el dólar en ese país. De hecho, un billete de un dólar equivale a dos billetes de 1 millón de bolívares y resulta más práctico dar vueltos en dólares que en bolívares, además de que los precios de todas las cosas están tasados y marcados en la moneda norteamericana.

La inflación del país bolivariano en el mes de enero del 2021 fue de 55%, mientras que la de Colombia en el mismo periodo fue de 0.41%, este solo dato nos da una idea de la situación tan crítica que vive el venezolano que ve cada día su salario más y más empobrecido. A manera de ejemplo basta citar el caso de un producto de primerísima necesidad allá, como lo es la harina de maíz, que hace apenas dos años tenía un precio por kilo de 90.899 bolívares y ahora su precio supera los 2.200.000 bolívares. Son muy pocos los países del mundo que puedan mostrar un caos económico semejante.

Se ha cumplido a la perfección el perverso propósito del gobierno desde la época de Chávez de arruinar a los venezolanos para hacerlos muy dependientes de los subsidios y obsequios que el régimen pueda darles para sobrevivir, con lo que se asegura de su obediencia permanente, sobre toro en épocas de elecciones.