Iniciar un negocio no es tarea sencilla, debes pensar en el capital, los socios y todo el tiempo que deberás invertir, incluso antes de ver las ganancias. Muchos dicen que los negocios y la familia es mejor no mezclarlos, pero quién mejor que tu pareja, quien tiene tus mismos intereses y preocupaciones, para echar a andar un proyecto en conjunto.
Sin embargo no todo son sonrisas, ya que debes trabajar en una relación sana y honesta antes de que decidan lanzarse al agua. Después de estar seguro de la durabilidad y la madurez de la relación lo siguiente es dejar claro el pensamiento que tiene cada uno en cuanto al manejo de dinero, el compromiso y las áreas en las que cada quien se desempeñaría, al momento de emprender con tu pareja deja de ser un negocio del cual sacar dinero y se convierte en un proyecto de vida, es el punto medio en el que cada cual puede depositar sus conocimientos y experiencias, para esto es necesario que los dos tengan la misma visión respecto a dónde quieren llegar con la empresa que está por nacer.
Otro tip muy importante es definir los límites de la casa y el trabajo, tener claro que es una sociedad y no una jerarquía, que la meta es construir juntos, es fundamental tener tacto al momento de hablar de negocio o hacer observaciones, para no herir a quien amas, así como también no ocupar tiempo laboral en resolver problemas personales. Mantengan siempre su identidad, no teman expresar sus ideas por miedo a que su socio/pareja se moleste, ya que, de ser así esto se volverá costumbre y uno terminará frustrado.
El manejo de las finanzas es un punto primordial que deben dejar claro desde el inicio, aunque todo lo que ganen vaya a un mismo fondo es recomendable que cada uno cobre un sueldo y cuente con un ingreso de dinero, del que los socios sacarán a partes iguales para gastos de la empresa y gastos del hogar. De esta forma ambas partes verán ganancias por su trabajo y pueden ahorrar o invertir en cosas ajenas a lo que han construido en conjunto.
Últimamente son más y más las personas que se arriesgan a iniciar un negocio y una vida juntos, hace poco tuve la oportunidad de conocer IMAGINARY FRIENDS y a los dos emprendedores detrás de este proyecto, que sin duda inspiraron este artículo.
Lina y Diego son una pareja de artistas, que habían trabajado para diferentes empresas a lo largo de su vida, hasta que un día decidieron hacer algo más allá. De la necesidad de crear y compartir herramientas de juego y aprendizaje, para
niños y todos aquellos que tenemos alma joven, nace IMAGINARY FRIENDS.
Los IMAGINARY FRIENDS, son muñecos personalizados, fabricados a mano, hechos de tela con el fin de reducir la cantidad de residuos y a su vez aportar un granito de arena al planeta. En los seis años que llevan compartiendo y creando juntos han logrado expandir su marca a través de vitrinas digitales, redes sociales, así como también han compartido sus conocimientos en cursos y talleres, no solo de la elaboración de muñecos en tela, sino también de otras ramas del arte como el dibujo y la pintura.
Lina y Diego iniciaron su proyecto en la ciudad de Bucaramanga, pero con pasión, dedicación y mucho talento han logrado llevar a los IMAGINARY FRIENDS por el mundo, este joven matrimonio se encuentra actualmente en Chile, donde planean seguir creciendo y llenando al mundo de amor con sus creaciones.
Puedes encontrarlos en Instagram como: imaginary_friends