Hace unos años jamás pensé decir esto; actualmente, es una realidad con la que me despierto: Soy Mamá. Soy mamá de una hermosa niña de año y medio llamada Paloma, soy una persona feliz de ver sonreír a mi hija en las mañanas y escucharla decir “mamá”, pero sobre todo, tengo la fortuna de sentir el amor incondicional y sin barreras que siempre experimenté como hija ahora como mamá.

Hablo de Paloma porque al llegar a mi vida cambió todo en mi hogar, rutina, horarios de comida, trabajo y descanso, pero con ello también cambió mi forma de ver la moda.

La idea de ser madre de una niña siempre me gustó porque esa misma complicidad que yo tuve con mi madre ahora puedo experimentarla con mi hija a partir de vestirnos igual con diseños exclusivos, cómodos y divertidos. Aclaro, no es que todos los días me vista igual que me hija pero si aprovecho cada ocasión especial para que nuestras prendas tengan esa conexión que nos identifique.

A continuación les dejo unos tips para vestir igual que su hija sin caer en lo recargado de la moda:

1. Recuerde vestir con la paleta de colores Pantone Primavera 2016 como rosa cuarzo, salmón, verde menta, gris, y rojo fiesta.
2. Busque prendas que se ajusten y moldeen bien su cuerpo y el de su hija.
3. Los estampados se pueden lucir en vestidos holgados durante el día.
4. Encaje, tul y brillo para eventos de noche.
5. Son indispensables los accesorios como bolso para la mamá y diademas para las niñas para dar ese toque diferente al look.
6. Vestir igual nos ayuda a fortalecer el lazo madre e hija pues nos identifica con la otra.
7. En la sencillez de las prendas está la elegancia. No debemos saturar con figuras geométricas pues debemos recordar que son dos personas vestidas iguales.
8. Un mismo estilo nos hace lucir más parecidas de lo que creemos aunque con detalles que nos hacen únicas.
9. Vestirse igual que nuestra hija es un momento para disfrutar, divertirnos y crear recuerdos de estos primeros años.