Según Facundo Manes, neurólogo y científico argentino.” Los esquemas mentales son estructuras de pensamiento que nos permiten interpretar y categorizar la información proveniente de nuestro alrededor. A partir de ellos formamos nuestras creencias, es decir, organizamos las ideas acerca de nosotros mismos, de los otros y del mundo. Así, se conforma un modo de ver la realidad que se va desarrollando a lo largo de la vida.”
En una capacitación que realicé hace poco a unos jóvenes universitarios les comentaba que algunas creencias son maravillosas y nos benefician nuestros proyectos de vida, pero otras son limitantes y nos perjudican.
La siguiente lista de creencias limitantes son frutos de la primera parte de un ejercicio que desarrollé con ellos:
- El Dinero nunca me alcanza
- Me da pereza madrugar
- Odio que mi papá me abandonó
- Odio no tener dinero El amor es una mierda
- Todos los hombres son perros
- Dios nunca me escucha
- No me gusta mi vida
- No me gusta la gente tan positiva
- No me gusta lo que estoy estudiando
- Me siento fea
- Me da miedo opinar
- Estoy cansado de la rutina
- Detesto el reggaetón
- No me siento segura en esta ciudad
- Mi situación sentimental está jodida
- Me da aterra hablar en público
- Me fastidia que me den cantaleta
- Estoy harta de mi jefe
- No quiero tener hijos
- Me da miedo el cambio
- No me gusta mi pasado
- Odio los gritos y peleas de mis familiares
- Me da miedo no cumplir mis sueños y todo sea un caos
- No tengo tiempo para descansar
- ¿Para que nací?
- No quiero estar viva
Este listado de emociones fueron expresadas a través de la escritura y de pronto parecen irrelevantes porque un alto porcentaje de los latinoamericanosha tomado como deporte el quejarse por todo y por nada. Aun así no tienen la culpa de esta idiosincrasia, porque estas creencias se han transmitido en el hogar y el entorno y fue lo que poco a poco quedó en su esquema mental hasta convertirse en su realidad.
Hoy te invito a que tomes conciencia de que tienes un poder interior que puedes utilizar a tu favor, te invito a que busques la raíz de estas emociones, a que te perdones y a perdonar, sentirte merecedor, sanar tus miedos, aceptarte, amarte, dar amor, recibir amor, a mejorar tu diálogo interno, el diálogo con Dios y con las personas que te rodean, a pedir ayuda si es necesario. Es tu turno ahora de apropiarte e iniciar un cambio en tu esquema mental incorporando nuevas creencias y herramientas para que todos tus sueños se hagan realidad.
Aunque no sean verdad, si yo creo en mis creencias limitantes, estas determinarán mi vida. Las creencias pueden cambiarse, sólo son eso: creencias.